Si es hombre heteronormado no es necesario que lea este instructivo. Sólo agarre una camisa y un pantalón de mezclilla para el diario o de tela si es que tiene un funeral o un matrimonio al que ir. Si es mujer, por favor disponga su atención, luego de bañarse y habiendo aseado todas sus cavidades, se sentará en la cama, mirando el armario con cara de pena, el primer paso será abrir los cajones de ropa interior y comenzar muy detenidamente a elegir, si va a la oficina, le recomendamos una pantaleta de algodón perfectamente blanca y su sostén favorito, ese que levanta lo que a usted le gusta tanto levantar. Si tiene una cita por supuesto tiene que elegir lencería, una tanga de encaje a juego con un corpiño, puede ser negro, blanco, rojo fuego o color vino tinto, fíjese en que su corpiño no tenga muchos ganchos para que su pareja no demore más de 20 a 22 segundos en quitárselo, ahora bien, si va a pasar el día en casa, prefiera una pijama, de esta forma no será necesario usar nada debajo, en caso de encontrarse en luna sangrante, toda sabia mujer tiene ese calzón gigante, con manchas que nunca salieron, que guarda bien tapado en el cajón de los calcetines. Una vez elegido lo interno, pasaremos a elegir los versos fundamentales que vestirá ese día, si es laboral podrá ser un pantalón recto, una blusa blanca ondeando, un pañuelo con estampado de gatos y una chaqueta heredada, si es una noche de rumba y tumba, prefiera la ropa de ese rincón lleno de látex, botas altas y encanto que toda dama tiene. Si es una cita, un sugerente vestido o un tierno conjunto de falda, quizás una chaqueta de cuero coqueta para que la contra parte sepa con qué whisky se ha de emborrachar. Ahora los zapatos. Ya hemos mencionado las botas, pero si va a marchar prefiera zapatillas, si va al trabajo prefiera taco medio y si va a amar, recurra a la básica porno fantasía del tacón ridículamente alto. Ahora, si usted es una de esas divas hermosas que de vez en cuando las estrellas tienen el gusto de parir, podrá usar todo el artificio que quiera, sacar de lo masculino el monocroma, usar plataformas, plumas y trozos rotos de prejuicios, coronas, lentejuelas, minifaldas…, y como usted es una paloma no necesitará usar lencería si no quiere, se ganó el derecho de andar con el culo al aire a punta de tolerancia hacia los intolerantes, si usted es una de esas divas por favor vístase de noche y de música electrónica, vístase de redes sociales y comentarios públicos. Agregue tres gotas de perfume y una pisca de gallardía. (Quedan fuera de este instructivo, aquellos y aquellas que gozan usando uniformes en aquellos tonos verdes que endurecen los frutos del corazón) Se recomienda leer la letra chica